
El contingente griego estaba formado por curtidos ex combatientes de la Guerra del Peloponeso, cuyos oidos estaban llenos de los ecos de los éxitos griegos en las batallas de Platea y Maratón. El viaje estuvo jalonado por múltiples aventuras y vicisitudes, la más determinante de las cuales fue la pírrica victoria en la batalla de Cunaxa, en la profunda Babilonia en el 401 aC, que resultó irrelevante al caer el propio Ciro. Este hecho marcó el fín de la expedición militar como tal. A partir de ese momento, los compañeros persas se cambiaron de bando y engrosaron las filas del enemigo. Los cabecillas griegos, con el general espartano Clearco al frente de ellos, fueron o bien asesinados o bien capturados por encargo del sátrapa persa Tisafernes, con lo cual los 10.000 se encontraron abandonados a su suerte en lo más profundo del Imperio Persa, sin comunicaciones ni suministros de ningún tipo.
En este momento los griegos dan muestra de su espíritu indomable y escogen nuevos jefes y toman la decisión de encaminarse hacia el Norte, dirigiéndose hacia el Mar Negro, con la esperanza de poder así regresar a Grecia evitando los peligros del territorio persa. Uno de los jefes de esta república andante, y que nos legará el inmortal relato de esta expedición, fue Jenofonte.
El camino, plagado de peligros y penurias, finalizó con el famoso grito "Thalassa, Thalassa!!" (El Mar, el Mar!!) cuando por fín vieron a lo lejos el Mar, y con ello la esperanza de encontrar naves mercantes que les devolvieran a casa, tras unos cuantos miles de kilómetros caminados a sus espaldas.
Junto a los Comentarios a la Guerra de las Galias de Julio César, la Anábasis de Jenofonte es una las lecturas más utilizadas en el aprendizaje de las lebguas clásicas.
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La nueva forma de entender la historia
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Sólo me gustaría añadir un par de cosas: cómo Alejandro los tuvo como modelo durante parte de su periplo, sobretodo al principio donde le servían de guía.
ResponderEliminarPor otro lado, y haciendo un poco de vidas paralelas, recordar las aventuras de los almogàvers de Roger de Flor, cuyas aventuras relató Ramon Muntaner, y que en muchos pasajes recuerdan a los 10.000: empezando por su carácter mercenario, el poder como infanteria, la creación de la República Catalana itinerante mediante la Companyia, su cronista, capitanes, geografía de sus aventuras, etc.
Otro día ya lo cuento más extensamente, ya que fue objeto de mi trabajo de investigación.
Interesante paralelismo al que habría que dedicar un extenso post!!
ResponderEliminarFelicidades por el sitio y el post, me parece perfecto. Y la sugerencia de sila también espero leerla pronto!
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog, lo sigo hace tiempo y me parece realmente interesante. Y esta historia de los 10.000 es un clásico de lo cambiante que es la historia.
ResponderEliminarGenial artículo. Breve y claro. Genial el paralelismo de Sila. Ojalá lo veamos pronto.
ResponderEliminarUn saludo desde la potnia.
http://potnia.wordpress.com
Recién he conocido esta buena reseña del relato de Jenofonte y es muy interesante el paralelismo que se hace notar. Sólo una aclaración: el número de 10.000 que constantemente se repite sé refiere a los mercenarios que sobrevivieron a la batalla de Cunaxa y emprendieron el regreso. Ver: http://calvimontes.webs.com/ANABASIS.htm
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